¿QUE HUBIERAIS HECHO CON VEGUI?

Nuevo Plan de entreno para esta semana, ... algo monotemático y repetitivo (como la programación del 3 24, que cada 30 minutos repite lo mismo, pero en vez de con telediarios, con bici y gimnasio).

Como novedad, nos toca subir el nº de series y el nivel de carga. ¡Menuda buena noticia verdad!!! Qué gran semana se avista eh? Pues ya he empezado con las sesiones de gimnasio y aunque con algunas máquinas lo he conseguido, con otras me he limitado a subir la carga lo mínimo. Es medio trampa, pero me tranquiliza la moral pensar que cumplo, y la verdad es que sinceramente no sé si estoy preparada para mucho más!

Como ni con las pesas ni con la estática me ha pasado nada emocionante digno de inmortalizar en el blog, hoy me voy a aventurar a filosofar un poco, y os voy a plantear un pequeño dilema al que me he tenido que enfrentar. 

Voy a pseudo transformarme en Aristóteles (para los que no seáis "tan leídos como yo" fue un filósofo griego cargadito de sentido común) , y os voy a contar, a través de usa serie de deducciones lógicas, porqué el hecho de que haya estado a punto de comerme a mi querida hamster "Vegui", no tiene nada que ver con un problema de salud mental (es decir, locura).

Allá voy con mis deducciones: 

i. Ya os he contado previamente los cambios en plan de entreno, aumentando nº de series, y cargas.

ii. Al aumentar las series, como muy bien habréis deducido, aumenta también el tiempo de dedicación. 

iii. Hagamos el supuesto de que acostumbro a entrenar al medio día (digamos que llego al gimnasio a las 13:30h), y que el plan anterior tenía 1h:15m de duración.

iv. Pierdo 0 minutos hablando y comentando la jugada con la gente (esto no es un supuesto, en realidad soy medio autista sin el medio, cuando entreno, rara vez hablo).

v. Acababa así sobre las 14:45h (13:30h + 1:15h). Añadiendo una ducha rápida (por rápida me refiero a rápida de chica con pelo largo, aprox. 20 minutos), salía del club de entreno a las 15:05h, llegando a comer a casa sobre las 15:30h (con bastante hambre por cierto).

Veamos ahora con el cambio de entreno, con el nuevo plan. 


i. El aumento de carga y de repeticiones, me supone aproximadamente 30 minutitos más en el gimnasio.

ii. No repetiré todas las cuentas, tranquilos, tiraré por la vía rápida. Si antes llegaba a comer a las 15:30h, ahora que entreno 30 minutos más, llego sobre las 16:00h (sí, sí, ¡Las 16:00h!!!).

iii. Al ser más tarde, tengo más hambre.

iv. Al haber hecho más esfuerzo, tengo si cabe, todavía más hambre. 

v. Lo 1º que veo al entrar en la cocina es la jaula de Vegui, y no hay nada preparado en la nevera. ¿Qué haríais en mi caso?? Ser sinceros!!!

¿Prepararos la comida, y compartirla
con Vegui?

¿Quitarle el queso a Vegui para
coméroslo vosotros?

¿O condimentar bien a
Vegui y .... ?

He aquí, la conclusión aristotélica, que quería compartir con vosotros: Si hoy he estado a punto de comerme a mi Vegui no es porque esté loca, es que soy una chica muy normal y muy lógica.